Hoy quiero escribir sobre ti, aun que me ganen los prejuicios.


Es increíble, ya ha pasado un año desde que nos vimos con otros ojos, desde que cruzamos nuestros dedos, desde que me oculte tras tu espalda, desde que me refugiaste entre tus brazos, en fin desde nosotros... y ahora nuestra indiferencia nos hace felices, aun que a veces con total disimulo clavemos nuestras pupilas en el otro, aun que mi mirada te busque y te encuentre… Aun que tus manos busquen algo mas que un roce, y lo encuentren, aun que nuestros silencios busquen algo mas que herir, y no lo logren...


Lo sé me he vuelto cursi...
ELLA: ¿esto es vivir?
EL: no estas pensando en mi
ELLA: nunca pienso en otra cosa
EL: nunca piensas, date cuenta de como estas
ELLA: (aprieta las yagas en sus brazos) yo... es que... tú...
EL: ¿y vas a decir que todo es mi culpa? mira, escucha una cosa, llevo una vida culpándome por cada cosa mala que ocurre, llevo una vida entera tratando de no hacer daño...
ELLA: entonces ¿la culpa es mía, señor infidelidad?
EL: Tú, tú dijiste que me harías mas infeliz, ¡y yo no quise saberlo! (la toma de los brazos y la sacude) ¡Dime que me podría hacerme aun mas infeliz en este momento!
ELLA: ...he perdido a nuestro hijo.
Duele...


desde hace tiempo...
con fuerza...


no es tu culpa, es mi pasado...



...en otras palabras, mi culpa